Sellos de Puertas y Ventanas de Aluminio

Los sellos para puertas y ventanas de aluminio desempeñan un papel crucial en la eficiencia energética y en la prevención de filtraciones de aire y agua.

Los sellos para puertas y ventanas de aluminio desempeñan un papel crucial en la eficiencia energética y en la prevención de filtraciones de aire y agua. Estos sellos están diseñados para sellar las brechas y asegurar un cierre hermético, lo que ayuda a mantener la temperatura interior, evitar corrientes de aire y proteger contra la entrada de agua y polvo. Aquí hay algunos tipos comunes de sellos utilizados en puertas y ventanas de aluminio:

  1. Burletes o Gomas de Silicona: Se colocan alrededor del perímetro de la ventana o puerta para sellar eficazmente. La silicona es un material duradero y resistente a la intemperie.

  2. Cepillos o Selladores de Cerdas: Estos son cepillos flexibles que se instalan en los bordes de las puertas corredizas o ventanas para sellar los espacios entre el marco y el panel deslizante.

  3. Perfiles de Goma EPDM: Este material de goma es especialmente eficaz para sellar las juntas entre los marcos de aluminio y el vidrio. Es resistente a la intemperie y proporciona un buen sellado.

  4. Cintas Adhesivas de Espuma: Las cintas de espuma adhesiva se aplican en las rendijas y hendiduras para sellarlas. Son fáciles de instalar y proporcionan un buen aislamiento térmico.

  5. Juntas de Caucho: Se utilizan en las uniones y esquinas para garantizar un sellado completo. Estas juntas son flexibles y se adaptan bien a diferentes perfiles.

  6. Perfiles con Rotura de Puente Térmico: Algunas ventanas y puertas de aluminio están diseñadas con un sistema de rotura de puente térmico que incorpora materiales no conductores entre las partes interna y externa del marco, ayudando a evitar la transferencia de calor o frío.

  7. Perfil de Goma para Umbrales: Se instala en el umbral de las puertas para sellar la parte inferior y evitar la entrada de agua y corrientes de aire.

Es importante elegir sellos de alta calidad que sean resistentes a la intemperie y duraderos para garantizar un rendimiento efectivo a lo largo del tiempo. Además, realizar un mantenimiento regular y reemplazar los sellos desgastados o dañados contribuirá a mantener la eficiencia del sellado.